
Queridos jóvenes, estimadas autoridades civiles y eclesiásticas, distinguidos invitados, hermanos y hermanas en Cristo:
Con alegría y gratitud nos reunimos para cerrar este 46º Encuentro Nacional de Renovación Juvenil, una experiencia de fe, comunidad y renovación espiritual. Durante estos días, hemos compartido momentos de reflexión, oración y crecimiento, descubriendo la alegría que brota de buscar y encontrar a Dios en nuestras vidas.